Huellas, huellas y más huellas…

Tras Sudáfrica, Santoña y Ré vuelvo a la carga, pero esta vez con paseos pajariles en mi hábitat natural, la ciudad de Pamplona, así que para ello he visitado en las últimas semanas la zona de Mendillorri (16-2-2014) y el río Arga en Rotxapea y Magdalena (15-3 y 22-2-2014).

En estas fechas los cormoranes reinan las aguas y son de las aves más vistosas, sobre todo las de plumaje blanco en la cabeza, que les da un toque especial. Lo mismo se les ve posados en sus oteaderos habituales, que nadando, que volando, que en plenos buceos.

Cormorán nadando (22-2-2014)

Además, en el agua, como es habitual mandan también los ánades reales, de los cuales aún no he visto polladas, las gallinetas y las garzas reales.

Destacar también la fuerte actividad de los martines pescadores que van río arriba y río abajo, y un simpático mirlo acuático cerca de Burlada, que la verdad tenía ya bastante olvidado y si no me equivoco es el primero que veo en este 2014 por Pamplona.

Como siempre, en las orillas no faltan las habituales palomas (con alguna tórtola turca entre ellas), picarazas y mirlos, también muy activos.

Mirlo (15-3-2014)

Entre las visitantes de invierno, destaca la presencia de pinzones vulgares, aunque a mi parecer con menos ejemplares que en años anteriores.

Macho de pinzón vulgar (16-2-2014)

Los calores de la ya comenzada primavera empiezan a tener sus efectos y ya se ven también las primeras mariposas en zonas ajardinadas.

Mariposa (15-3-2014)

Por otro lado, las cigüeñas de la Magdalena ya han tenido sus primeras cópulas y se ven con facilidad encaramadas al nido que todos los años utilizan para la cría.

Cigüeña en el nido (15-3-2014)

Además, entre las aves, unas de las estrellas de estos días han sido sin duda alguna los reyezuelos listados, que tras años y años persiguiendo por fin he podido fotografiar decentemente.

Reyezuelo listado (16-2-2014)

Estos pequeños pajarillos no paran quietos, lo que no facilita el verlos tranquilos ni tampoco el poder retratarlos, pero bueno, e ahí el encanto también de la especie… Ahora me tocará ir a por el reyezuelo sencillo….

También interesantes los coloridos verdecillos (muy sonoros y alborotadores en las partes altas de los árboles), jilgueros, lúganos, verderones, carboneros y herrerillos.

Herrerillo (16-2-2014)

Los de colores más apagados también están a tope estas semanas. Los gorriones molineros dominan la zona de los caballos de Goñi, las currucas capirotadas también se oyen con facilidad, y los diminutos chochines, que nunca antes había oído tantos diferentes en un mimo día están en pleno celo y con cantos de reclamo en cualquier zarza que asoma en los márgenes del Arga.

Chochín escondido (15-3-2014)

No han faltado las aves de tamaño algo mayor, como zorzales comunes, zorzales alirrojos (formando un bando muy numeroso en Mendillorri en el que llegué a contar 28 ejemplares distintos), grajillas, cornejas y estorninos, tanto negros como pintos.

Estornino pinto (16-2-2014)

Destacar también en Mendillorri estas marcas en el suelo. Una especie de depresiones en una zona de cipreses que tenía tierra en forma de bañeras… ¿Os animáis alguno a decir de que se trata? La solución al final de la entrada… jejejeje

¿Que son estas bañeras? (16-2-2014)

Y como momento bonito y excitante de estas excursiones, tuve la oportunidad de ver una buena pelea entre un ratonero y un cernícalo.

El ratonero cicleaba tranquilo, y un cernícalo se le lanzaba. El primero le sacaba las garras y el segundo huía, a pesar de que al final el más pequeño de los dos (que yo creo que estaba defendiendo su territorio de cría), se salió con la suya y consiguió alejar al ratonero de la zona.

Ratonero enseñando las garras al cernícalo (16-2-2014)

Pero lo más importante sin duda alguna a lo largo del río durante estas salidas para mí, ha sido el seguimiento de varias huellas diferentes, y todas bajo un mismo puente.

En primer lugar como es lógico, los perros de paseantes y huellas de gatos domésticos pero que viven sueltos y asilvestrados son bastante habituales.

Huella de gato entre huellas de ánade y perro (15-3-2014)

Entre las de mayor alegría, sin duda alguna están las de nutria y garduña, que a pesar de las limpias de vegetación que se han realizado en las orillas del río este año con la idea de minimizar daños y riesgos en inundaciones, nos dan la esperanza de pensar que ambos mamíferos siguen en la zona.

Huellas de «Paca» la nutria (22-2-2014)

Huellas de garduña (15-3-2014)

Huellas de garduña (22-2-2014)

Detalle de huella de garduña (15-3-2014)

Huellas de roedores también son fáciles de observar cuando el suelo se humedece y pasan por él, como ha sido el caso con las últimas lluvias.

Huellas de roedores, nada fáciles de identificar (15-3-2014)

También no faltaban huellas de aves habituales en medios acuáticos.

Huella de garza (15-3-2014)

Y algunas más difíciles de identificar que otras… Yo creo que se trata de mirlo, pero podrían ser también de picaraza…

Huella de ave… ¿mirlo o picaraza? (15-3-2014)

Y para ir acabando, aquí están los creadores de esas bañeras de tierra de las que hablábamos antes… Se trataba de una tresena de gorriones comunes que no paraban de revolcarse en la tierra supongo que para desparasitarse, formando los huecos que he mostrado unas cuantas fotos antes.

Gorriones en pleno baño de tierra… ¿los veis? (16-2-2014)

Además, decir que el pasado 20 de marzo, fue el día de este pequeño animal, el gorrión común, así que como homenaje a esta especie, el dicho para acabar esta nueva entrada va para ella… «Más vale ser gorrión de pueblo que águila real de campo».

Macho de gorrión común (16-2-2014)